6 razones por las que hacer una dieta puede que no te favorezca, incluso si quieres perder pes
Las dietas tienen fama de ser exigentes pero cumplidoras. Y si bien esto puede ser muy cierto, existen algunas razones por las que la típica dieta de un régimen alimenticio estricto, y una fecha de inicio y fin puede no ser lo que tu cuerpo realmente necesita.
Una gran cantidad de expertos, sin embargo, resaltan que este tipo de patrones de alimentación en realidad suelen tener un porcentaje alto de fracaso, y pueden dejar secuelas en nuestra salud.
Por eso, la médica especialista en nutrición Mónica Katz detalla algunas de las razones de esto y da los tips para un descenso de peso que pueda sostenerse en el tiempo sin deteriorar tu salud.
El cerebro no reconoce las dietas
El cerebro, por mucho que nos gustaría que lo hiciera, no reconoce cuando ponemos el cuerpo a dieta. Necesita recibir energía, por lo que si alguna caloría ingresa en el sistema, será gastada naturalmente. En caso de que no reciba la energía suficiente (lo que puede suceder con algunas dietas), se dará un mecanismo llamado psiconeurohormonal, que limita la pérdida de peso y promueve el “rebote”.
Nuestro cuerpo puede resistirse
Debido a nuestras costumbres alimenticias, nuestro cerebro genera una especie “código de barras” en el que se incluye todo lo que nos gusta y estamos acostumbrados a comer. Cuando nos imponemos dietas que se oponen a ese código que hemos creado, el cuerpo reacciona negativamente.
Es común que las personas dejen las dietas porque no las toleran más, porque son cambios demasiado exigentes para sus cuerpos en un periodo muy corto de tiempo.
Reduce niveles de leptina
Vivir en una dieta estricta que se supone nos hará perder peso rápidamente puede disminuir los niveles de leptina, hormona que ayuda a adelgazar reduciendo el hambre y elevando el gasto calórico. Como resultado, sentimos más hambre porque nuestro cuerpo necesita reponer la energía que no gana.
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Trastornos alimenticios
Las personas que se imponen una dieta frecuentemente son 8 veces desarrollar trastornos alimentarios, lo que deteriora su estado mental y físico.
Patologías a la vista
Perder y ganar peso sucesivamente, algo que sucede con frecuencia en personas que realizan dietas estrictas alternativamente, se asocia más a más patologías que el sobrepeso estable. Es decir, tener un sobrepeso que se mantiene en el tiempo es más saludable que perder y ganar peso por “temporadas” entre una dieta estricta y otra.
Necesidades básicas
Los humanos necesitamos una dosis diaria de calorías, nutrientes y placer. Las dietas estrictas generan una cantidad notablemente baja de placer (de hecho, con frecuencia generan ansiedad y otros sentimientos desagradables que deterioran nuestro estado mental). Esto puede llevar a una persona a abandonar la dieta, y con razón.
Nada de esto significa que los regímenes alimenticios no funcionan, pero en general es poco realista creer que realizar una dieta ultra estricta durante un periodo corto de tiempo resolverá nuestros problemas de peso.
Las condiciones físicas, alimenticias y de salud que nos llevaron a tener sobrepeso no se hicieron efectivas de la noche a la mañana, así que es poco creíble que un régimen estricto nos resolverá todo en poco tiempo.
Fuente:.LBG