Toxicólogo la Universidad de California descubrió que la adicción a los automóviles nuevos puede desarrollar cáncer. “El olor a nuevo no es bueno”
El toxicólogo David Voltz de la Universidad de California (EE. UU.) Descubrió que los residentes de San Francisco y Los Ángeles densamente poblados tienen diez veces más probabilidades de desarrollar cáncer debido a su adicción a los automóviles nuevos.
El hecho es que el aroma característico de un automóvil nuevo de un concesionario de automóviles es literalmente el olor a riesgo. Está formado por dos carcinógenos conocidos, formaldehído y benceno.
En el caso de un automóvil nuevo, todos los elementos de revestimiento interior y accesorios tienen la misma composición de sustancias que se forma durante su fabricación. Pegamento, pintura, todo tipo de plásticos, textiles, caucho, todos estos están impregnados con productos químicos para su protección y durabilidad. Generan los denominados “gases residuales”, compuestos volátiles cuyas partículas pueden moverse fácilmente dentro del habitáculo, adherirse al polvo y depositarse con él en las superficies.
Según la investigación de Volz, es suficiente pasar solo 20 minutos en un automóvil cerrado para que la concentración de sustancias cancerígenas en el cuerpo supere la norma de seguridad. Esto es a pesar del hecho de que el estadounidense promedio pasa más de una hora en el automóvil todos los días, y para muchas personas, desde los mensajeros hasta los taxistas de Uber, todas sus actividades están asociadas con estar en el automóvil. No hay datos sobre autos viejos, con el tiempo la concentración de benceno y formaldehído en el acabado disminuye, pero cada caso es individual.
El toxicólogo insta a no apresurarse a sacar conclusiones. En primer lugar, mucho depende de varios factores, incluida la temperatura del aire, el clima, si un conductor conduce con la ventana abierta y la frecuencia con la que se usa el aire acondicionado. En segundo lugar, se trata de aumentar el riesgo de contraer cáncer y no crear una amenaza directa de tal resultado. La información está dirigida principalmente a los fabricantes de automóviles que necesitan encontrar alternativas seguras a las sustancias utilizadas en el acabado.
El estudio fue publicado en https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S016041202100026X