El extraño encuentro aéreo del incidente OVNI de Junio de 2016 sobre West Kirby
En los últimos tiempos, los informes sobre avistamientos de ovnis han ocupado titulares con creciente frecuencia. La entrada en vigor de la Ley de Divulgación de UAP en 2023 ha obligado a las agencias gubernamentales a hacer públicos todos los datos relacionados con los OVNIs en un plazo de 300 días. Esta revelación podría incluir muestras, tecnología e incluso artefactos recuperados de encuentros con objetos voladores no identificados.
No obstante, la divulgación de ciertos datos puede ser retrasada por el presidente de los Estados Unidos si se considera que representan una amenaza para la seguridad nacional. Estas disposiciones plantean interrogantes sobre lo que realmente se esconde detrás de los enigmáticos ovnis.
La inteligencia estadounidense ha reconocido haber encontrado aeronaves de origen no humano. Además, han desplegado equipos de búsqueda especializados dedicados a la recuperación de ovnis dañados e incluso intactos. Aunque suene a la trama de una serie de Netflix, estas investigaciones y descubrimientos son reales.
Durante décadas, la península ha sido testigo de actividad ovni. Ahora que la legislación estadounidense reconoce algunos de estos fenómenos, explicar los avistamientos de extraños artefactos en nuestros cielos resulta cada vez más difícil. A veces, incluso los expertos se confiesan impotentes ante la tarea de comprender lo que realmente está ocurriendo.
Uno de esos incidentes tuvo lugar en junio de 2016.
Un piloto a bordo de una avioneta Cessna, viajando a una altitud de aproximadamente 1.825 pies y a una velocidad de 105 nudos, se encontró con fenómenos inusuales. De repente, su avión comenzó a temblar y los instrumentos de la cabina se comportaron de manera extraña. Fue entonces cuando el piloto avistó un enorme objeto redondo, con un diámetro de unos 350 pies, con un Airbus 320 debajo, con colores blanco y naranja similares a los de un avión de pasajeros de EasyJet.
El piloto logró evitar una colisión con el ovni y el avión de pasajeros, los cuales, según su percepción, parecían estar conectados de alguna manera, posiblemente a través de un campo magnético.
Intentó informar del incidente a los controladores aéreos del aeropuerto John Lennon, pero ocurrió algo extraordinario: el gigantesco ovni y el avión debajo de él repentinamente disminuyeron de tamaño y adquirieron una palidez fantasmal, antes de desaparecer del cielo tras un destello de luz.
Tras este incidente, el piloto desarrolló un profundo sentido de paranoia y finalmente dejó de volar por completo. A pesar de las advertencias de un hombre que afirmaba ser un oficial de inteligencia del MI5, el piloto compartió su experiencia con tantas personas como pudo.
No obstante, la pregunta sobre lo que realmente sucedió ese día en los cielos de West Kirby sigue sin respuesta. Quizás, gracias a la Ley de Divulgación de UAP, podamos comenzar a descubrir la verdad detrás de los enigmáticos ovnis.