Gatos domésticos muertos por gripe aviar transmitida por leche de vacas infectadas en los EE.UU.
En un giro inesperado, más de la mitad de los gatos domésticos que habitaban cerca de granjas lecheras en Texas y Kansas, donde se han reportado casos de una variante altamente patógena de gripe aviar, murieron tras ser alimentados con leche de vacas infectadas, informaron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE.UU.
Según el informe publicado en la revista Emerging Infectious Diseases, a mediados de marzo se detectó por primera vez un caso de vaca con una enfermedad inespecífica, seguida de síntomas como pérdida de apetito y reducción en la producción láctea. Pocos días después, aproximadamente una docena de gatos que habían consumido calostro crudo y leche de estas vacas, junto con otras, comenzaron a mostrar comportamientos inusuales.
Los felinos exhibían síntomas de depresión mental, rigidez corporal, falta de coordinación y movimientos erráticos en círculos. Además, experimentaron pérdida de visión y secreciones nasales y oculares. Posteriormente, los gatos fueron encontrados muertos sin signos aparentes de lesiones. Un análisis post mortem confirmó la presencia del virus de la influenza A en muestras de tejido de dos gatos fallecidos. El Laboratorio Nacional de Servicios Veterinarios del Departamento de Agricultura de EE.UU. confirmó que se trataba de la cepa altamente patógena H5N1 de gripe aviar.
Las investigaciones sugieren que la exposición de los gatos al virus ocurrió a través del consumo de leche de vacas infectadas, que contenía una alta concentración de ácido nucleico del virus. Aunque se baraja la posibilidad de que la exposición a aves silvestres muertas también haya contribuido, la transmisión del virus de vacas a gatos a través de la leche cruda es un fenómeno nuevo y preocupante.
Si bien los CDC señalan que la susceptibilidad de los felinos al H5N1 está bien documentada, la transmisión de este virus entre mamíferos plantea nuevas preocupaciones sobre su capacidad de propagación y adaptación. Aunque la infección humana a través del contacto con gatos infectados es poco probable, la exposición prolongada y sin protección al animal podría representar cierto riesgo.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) ha asegurado que la pasteurización de la leche puede inactivar el virus, aunque no se espera que elimine por completo su presencia. A pesar de la detección de material genético de gripe aviar en muestras de leche de vaca, las autoridades afirman que no representan un riesgo real para los consumidores. Sin embargo, instan a la precaución y a una mayor investigación para comprender mejor este fenómeno y sus implicaciones.