Enigma en la I-15: El Encuentro cercano de un Marino de la marina de los EE.UU. con un OVNI
Un veterano de la Marina relata su escalofriante encuentro con un objeto volador no identificado en una noche oscura de California
En una noche tranquila de 1971, un suboficial de segunda clase de la Marina, cuya identidad se mantiene en anonimato por petición, vivió un suceso que desafía toda explicación convencional. Mientras se encontraba varado en un tramo desolado de la Interestatal 15, cerca de la Estación Aérea Naval Miramar, su rutina nocturna se transformó en un episodio que ha intrigado a expertos en fenómenos aéreos no identificados durante décadas.
El veterano narró cómo, alrededor de las 3:00 a.m., su coche se quedó sin gasolina, obligándolo a detenerse. Fue entonces cuando escuchó un sonido peculiar, “una liberación de aire”, seguido del crujido de la grava al otro lado de la carretera. Lo que vio a continuación fue una nave “largo, bajo y extremadamente aerodinámica”, posada sobre el suelo sin ruedas visibles, con ventanas de un material desconocido que no reflejaban la luz como lo haría el vidrio.
El miedo se apoderó de él cuando intentó, y milagrosamente logró, arrancar su coche para escapar de la escena. A la mañana siguiente, acompañado por un vecino, solo encontraron una pequeña hendidura en la grava, como única evidencia física de la presencia de algo inexplicable.
La Secuela del Encuentro:
Este incidente dejó una marca indeleble en la vida del marinero. No solo tuvo dificultades para dormir y una persistente ansiedad, sino que también apareció una misteriosa marca en su pierna, la cual los médicos no pudieron identificar más allá de una simple “mancha”. Este detalle ha alimentado especulaciones sobre qué más pudo haber ocurrido durante esos momentos de los que el veterano no tiene recuerdo consciente.
El Impacto de los Fenómenos No Identificados:
Casos como el de este marinero añaden capas de complejidad al estudio de los OVNIs, donde la línea entre realidad y misterio se desdibuja. Mientras algunos buscan explicaciones racionales relacionadas con tecnología militar secreta o fenómenos atmosféricos, otros ven en estos relatos la posibilidad de visitas extraterrestres o dimensiones desconocidas.
El encuentro del marino con el misterioso objeto en 1971 sigue siendo una pieza intrigante del vasto rompecabezas de los fenómenos aéreos no identificados. Aunque el incidente no se ha resuelto, sirve como un recordatorio de que, en la vastedad del universo o incluso en los confines de nuestra atmósfera, existen misterios que desafían nuestra comprensión actual. Este caso, junto con muchos otros, espera en el umbral de la ciencia y la especulación, invitando a futuras investigaciones y tal vez, algún día, a una revelación que pueda traer luz a estas oscuras noches de incertidumbre.
Fuente : examiner.com