Amenazas, Intimidación y Psiónica: Un Denunciante Militar Expone la Guerra Sucia Tras el Secreto de los OVNIs/UAPs
Mike Herrera, veterano de la Marina, revela a Liberation Times una campaña de presión contra investigadores del Congreso, describe una operación encubierta en Indonesia y detalLa cómo una red de seguridad financiada por café apoya a los testigos.
En los pasillos del poder en Washington D.C., la investigación sobre Fenómenos Anómalos No Identificados (FANIs) se topa con un muro no solo de secretismo, sino de coerción activa. Mike Herrera, un veterano de la Marina, se ha convertido en una voz crucial que articula esta presión invisible pero tangible. En una extensa entrevista con Liberation Times, Herrera no solo detalla las tácticas de intimidación utilizadas contra políticos y denunciantes, sino que también conecta su experiencia personal en una misión humanitaria en Indonesia con unas acusaciones extraordinarias que involucran programas de acceso especial, tecnología de origen no humano y la supuesta utilización de habilidades psiónicas.
La Sombra en el Capitolio: Presión e Intimidación Sistémicas
Herrera describe un ambiente enrarecido donde la búsqueda de transparencia es sistemáticamente saboteada. “Llega como una sensación antes de convertirse en un hecho”, explica, señalando que quienes hacen “las preguntas equivocadas” son observados, presionados o silenciados. Esta intimidación, afirma, va más allá de susurros en los pasillos; es una demostración de poder calculada.
“Usan la vigilancia para incomodar a la gente; los helicópteros son el mayor problema. Sobrevuelan la residencia de alguien… simplemente como recordatorio: ‘Estás en nuestro radar'”.
El veterano señala sin ambages que esta presión proviene de agentes de la Comunidad de Inteligencia y contratistas del gobierno, y acusa a miembros del personal e incluso a congresistas en ejercicio de actuar como “agentes de la CIA” para ocultar información y obstaculizar las investigaciones, particularmente sobre recuperaciones de accidentes e ingeniería inversa. Cuando se le pregunta sobre el uso del chantaje, su respuesta es categórica: “Absolutamente, lo sé con certeza”.
El Origen: La Misión en Indonesia y la Nave Octogonal
La historia de Herrera no nace en los comités del Senado, sino entre los escombros de Padang, Indonesia, tras un devastador terremoto de magnitud 7.6 en 2009. Durante una misión humanitaria, relata que su equipo de seis hombres se encontró con una aeronave octagonal, manufacturada y con detalles como remaches y costuras, flotando silenciosamente. La situación escaló rápidamente cuando fueron confrontados y amenazados por personal estadounidense no identificado, que portaba armas y carecía de insignias de identificación convencionales.
Este evento, afirma, fue un punto de inflexión que confirmó para él dos realidades explosivas: “Primero, que teníamos la tecnología, y segundo, que la obtuvimos de otro lugar, lo que significa que la inteligencia no humana existe”. Inicialmente, Herrera sospechó que la operación involucraba trata de personas, una acusación que luego matizaría.
La Corroboración: Jake Barber y el Elemento Psiónico
Herrera no está solo en sus afirmaciones. Su testimonio encuentra eco en Jake Barber, un veterano de la Fuerza Aérea y piloto de helicóptero que se presentó públicamente en NewsNation. Barber, quien afirma haber volado en misiones de recuperación de FANIs, dirige ahora Skywatcher, un grupo de investigación. Barber ha verificado la esencia de la historia de Herrera, pero introduce una distinción crítica: lo presenciado no fue trata de personas, sino el reclutamiento y transporte voluntario de individuos con habilidades psiónicas (capacidades mentales elevadas como la telepatía) desde Indonesia, potencialmente para interactuar o invocar tecnología FANI.
Herrera corrobora esta versión: “La forma en que me describieron las operaciones fue prácticamente idéntica a eso… No dudo en absoluto de que se tratara de psiónica”. Esta revelación sitúa el incidente de Indonesia dentro de un marco aún más complejo y controvertido, que implica programas encubiertos que operan en los límites de la ciencia conocida.
Los Peligros Tangibles: Supresión Tecnológica, Salud y Finanzas
Más allá de lo extraordinario, Herrera destaca los riesgos humanos y materiales. Describe dos mundos superpuestos dentro de estos programas secretos: el “cinético”, de operaciones de seguridad y recuperación, y el “técnico”, de laboratorios de ingeniería inversa. En este último, afirma, la supresión de tecnología contra inventores es un “gran problema”.
Los peligros para la salud son igual de graves. “Ha habido enfermedades y otros problemas para los cuales la gente no puede recibir tratamiento porque las operaciones son clasificadas y técnicamente no existen”, relata, explicando cómo incluso el Departamento de Asuntos de Veteranos (VA) ha negado atención a personal afectado.
El arma final, según Herrera, es la ruina financiera mediante la revocación de autorizaciones de seguridad, que efectivamente excluye a los denunciantes de empleos bien remunerados en la comunidad de inteligencia, poniendo en riesgo la estabilidad de sus familias.
De la Denuncia a la Acción concreta
A pesar del panorama sombrío, Mike Herrera encarna una transición de la queja a la acción constructiva. Su iniciativa, Beyond Black Coffee, utiliza las ventas de café para financiar una red de seguridad que cubre gastos médicos, de viaje y de seguridad para denunciantes verificados que han acudido a los canales oficiales. Este esfuerzo pragmático subraya un principio fundamental: para romper el ciclo de secretismo e intimidación, se debe ofrecer un apoyo tangible y creíble a quienes se juegan todo por hablar.
Su testimonio, junto con el de otros como Jake Barber, ya no habita los márgenes del debate. Ha permeado la conciencia del Congreso, impulsando legislación histórica y audiencias públicas. La historia de Herrera es un recordatorio de que la búsqueda de la transparencia en uno de los secretos mejor guardados del gobierno rara vez es una batalla de testigos, sino una guerra de attrition contra un aparato de secreto profundamente arraigado y decidido a permanecer en las sombras.