“Avistamiento de un “platillo volante” en la Alemania” Documento de la CIA describen un encuentro cercano con un objeto metálico revelando detalles inquietantes

En los archivos desclasificados de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) se encuentra un informe peculiar, fechado en 1952, que documenta el testimonio de Oscar Linke, un exalcalde de Gleimershausen, Alemania, y su hija Gabriella, sobre el avistamiento de un objeto no identificado en la zona soviética del país. El documento, marcado como “información no evaluada”, detalla un encuentro que ha alimentado décadas de especulaciones sobre tecnología secreta y fenómenos aéreos inexplicables.

El incidente en el bosque de Hasselbach

Según el testimonio jurado de Linke, recogido por oficiales de inteligencia de Berlín Occidental, el evento ocurrió durante el crepúsculo cerca del pueblo de Hasselbach. Mientras viajaba en motocicleta con su hija de 11 años, una llanta pinchada los obligó a caminar. Fue entonces cuando Gabriella señaló una figura distante, que inicialmente confundieron con un ciervo. Al acercarse, Linke describió haber visto dos individuos vestidos con trajes metálicos brillantes, junto a una estructura circular de aproximadamente 15 metros de diámetro, semejante a un “gran sartén volador”.

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El objeto presentaba dos filas de orificios en su perímetro y una torre cónica negra en su parte superior. Según Linke, los hombres ingresaron rápidamente al artefacto al escuchar a Gabriella. Acto seguido, el objeto comenzó a emitir un resplandor verde que se tornó rojo, acompañado de un zumbido. La torre central se retrajo, y el artefacto ascendió girando, rodeado de llamas, antes de desaparecer en dirección a Stockheim.

Evidencia física y contexto histórico

Lo que convirtió este relato en más que una simple anécdota fue el descubrimiento de una marca circular en el suelo, coincidiendo con la forma de la torre del objeto. Linke, quien inicialmente sospechaba que se trataba de un prototipo militar soviético, destacó el temor a represalias por divulgar secretos tecnológicos en plena Guerra Fría.

El informe menciona que otros residentes reportaron haber visto un “cometa” aquella noche, aunque ninguno con el nivel de detalle proporcionado por Linke. El documento, originalmente publicado en el periódico griego Kathimerini, fue catalogado por la CIA bajo el código *00-V-23682*, pero su veracidad nunca fue confirmada.

Legado y preguntas sin respuesta

Este caso, ahora parte del registro histórico desclasificado, ilustra la fascinación y el misterio que rodean los fenómenos aéreos no identificados en el siglo XX. ¿Era el objeto de Linke un experimento secreto, un fenómeno natural malinterpretado o algo más? A falta de pruebas concluyentes, el incidente sigue siendo un enigma, pero su inclusión en archivos oficiales lo consolida como un episodio relevante en la ufología y la historia militar.

El testimonio de Oscar Linke, respaldado por su posición como exautoridad local y la evidencia física descrita, ofrece un relato intrigante que trasciende las décadas. En un contexto de tensiones geopolíticas y avances tecnológicos acelerados, este avistamiento refleja tanto los miedos de la época como la perdurable incógnita sobre lo que podría estar más allá del conocimiento humano.

 

Referencia 

‘FLYING SAUCERS’ IN EAST GERMANY – CIA 

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