“Científicos se mantienen en alerta” Asteroide que NASA le perdió la trayectoria 2007 podría pasar en el 2024. ¿Qué posibilidades hay que termine impactando la tierra?
El cosmos, ese vasto universo en el que habitamos, a menudo guarda sorpresas inesperadas. En esta ocasión, la Agencia Espacial Estadounidense, NASA, ha dado a conocer información sobre un asteroide, bautizado como 2007 FT3, que ha mantenido a los científicos alerta desde su descubrimiento en el año 2007.
Este cuerpo celeste, cuya trayectoria se había perdido poco después de su hallazgo, fue clasificado como un “asteroide perdido”. Sin embargo, tras un riguroso rastreo y análisis, la NASA ha confirmado que las probabilidades de que 2007 FT3 impacte contra la Tierra son extremadamente bajas.
Las estimaciones actuales sitúan la probabilidad de impacto de 2007 FT3 en un 0,0000096 por ciento para el 3 de marzo de 2030, y en un 0,0000087 por ciento para el 5 de octubre de 2024. A pesar de estas cifras, de producirse El impacto, este asteroide posee la capacidad de liberar una energía equivalente a 2.600 millones de toneladas de TNT, lo cual podría ocasionar daños significativos a nivel regional, aunque no a escala global.
En el amplio catálogo de asteroides cercanos a la Tierra conocidos por la NASA, se han identificado más de 32.000 NEAs (Objetos Cercanos a la Tierra) y más de 120 NECs (Cometas Cercanos a la Tierra) de período corto. El Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra (CNEOS) de la NASA se encarga de monitorear la mayoría de estos cuerpos celestes.
Entre estos objetos, uno de los más relevantes es el asteroide conocido como 29075 (1950 DA), con un diámetro de 0,81 millas (aproximadamente 1,3 kilómetros) y un peso estimado en 78 millones de toneladas métricas. Descubierto en 1950 y posteriormente “perdido” durante medio siglo, este asteroide presenta una probabilidad de impacto del 0,0029 por ciento para el 16 de marzo de 2880. En caso de colisión, liberaría una energía equivalente a 75 mil millones de toneladas de TNT , una cantidad devastadora capaz de tener consecuencias catastróficas para la humanidad.
A pesar de estos datos, los científicos de la NASA enfatizan que las posibilidades de impacto de estos asteroides son mínimas y que actualmente no representan una amenaza inminente para nuestro planeta. Sin embargo, el continuo monitoreo y estudio de estos cuerpos celestes son cruciales para comprender y prevenir posibles riesgos en el futuro.
El cosmos sigue siendo un vasto y misterioso escenario que despierta la curiosidad y la necesidad de exploración y estudio constante por parte de la humanidad. La ciencia y la tecnología continúan siendo nuestras mejores herramientas para comprender y enfrentar los desafíos que el universo nos presenta.
