El coronavirus se ha cobrado la vida de 15 millones de personas, según las últimas estimaciones de la OMS, y las pérdidas siguen creciendo
La pandemia de COVID-19 ha retrocedido (o más bien se ha tomado un respiro), pero el mundo ha sentido la peor parte de las pérdidas sufridas. La enfermedad cobró la vida de un gran número de personas. En su último estudio, la OMS intentó estimar el número real de muertes en todo el mundo asociadas a esta enfermedad. Los expertos de la organización llegaron a la conclusión de que al cierre de 2021 se acercó a los 15 millones de personas. Al mismo tiempo, según informes de varios países, esta cifra fue de solo 5,4 millones.
Los expertos de la OMS concluyeron que los datos oficiales se subestimaron al menos tres veces. Las razones de esto radican en las características específicas de la enfermedad y en el hecho de que no todos los estados presentaron informes correctos, y algunos no proporcionaron ninguna información. En este sentido, una estimación más correcta de la mortalidad real por coronavirus se puede hacer por la diferencia entre el exceso de mortalidad y la mortalidad esperada para cada país. Pero incluso en este caso, por razones objetivas, la precisión deja mucho que desear.
Para resolver este problema, los científicos utilizaron modelos matemáticos probabilísticos que tienen en cuenta muchos factores. Los cálculos muestran que en 2020 y 2021, el coronavirus provocó la muerte de 14.800.000 habitantes de nuestro planeta. Esta cifra es “asombrosamente alta” y supera fácilmente todas las pandemias de gripe de las últimas décadas. Pero esta trágica cifra puede parecer optimista en comparación con los hallazgos de otros grupos de investigación. Sus estimaciones de muerte por COVID para 2020 a 2022 oscilan entre 18 millones y 30 millones.