El denunciante expone un encubrimiento gubernamental y advierte sobre una “civilización separatista” con tecnología avanzada
Matthew Brown Rompe el Silencio: Denuncia Programa Secreto de Rastreo de Naves No Humanas
En una revelación sin precedentes, Matthew Brown, exfuncionario de inteligencia con acceso a información altamente clasificada, ha salido a la luz pública para denunciar la existencia de un Programa de Acceso Especial No Reconocido (uSAP) dedicado al rastreo de naves aeroespaciales de origen humano y no humano. En una entrevista exclusiva con los periodistas Jeremy Corbell y George Knapp en el podcast WEAPONIZED, Brown detalló los riesgos personales y profesionales que enfrenta al exponer lo que califica como “una realidad paralela de secretismo y corrupción”.
Un Acto de Conciencia con Graves Consecuencias
Brown, cuyo informe fue presentado en el Registro del Congreso en noviembre de 2024, admitió que su decisión de hablar públicamente podría costarle su libertad e incluso su vida. “Estoy renunciando al futuro que construí para mí y para una posible familia”, declaró. Aseguró que, aunque valora su servicio al gobierno, el sistema actual no permite que los funcionarios actúen conforme a sus principios éticos.
El denunciante enfrenta cargos que podrían resultar en cadena perpetua o incluso la pena de muerte, según sus propias palabras. Sin embargo, insiste en que su motivación es el deber cívico y la necesidad de exponer lo que describe como un “aparato de secretismo omnipresente” que ha corrompido múltiples sectores de la sociedad.
La Censura Interna y la “Radioactividad” de los Denunciantes
Brown relató cómo, tras la publicación del artículo del New York Times en 2017 sobre el Programa de Identificación de Amenazas Aeroespaciales Avanzadas (AATIP), las agencias de inteligencia impusieron restricciones extremas. Mencionar nombres como el de David Grusch —otro denunciante clave— en chats clasificados era considerado “radiactivo”, lo que llevaba al despido inmediato de quienes lo hicieran.
Según Brown, este nivel de control no solo protege secretos tecnológicos, sino que también oculta una verdad fundamental: la humanidad no está sola. “El secretismo ha privado a generaciones del derecho a saber quiénes somos y qué está ocurriendo”, afirmó.
La Constelación Inmaculada y la Evidencia de Tecnología No Humana
Uno de los hallazgos más impactantes de Brown fue un informe clasificado titulado Constelación Inmaculada, descubierto dentro de archivos relacionados con los juegos de guerra de la Base Schriever en 2018. El documento, que inicialmente parecía rutinario, contenía información explosiva: un programa encubierto liderado por Lue Elizondo, exdirector del AATIP, dedicado a recuperar y estudiar tecnología anómala.
Entre las revelaciones más impactantes se encuentra un incidente en el Océano Pacífico, cerca de Kamchatka, donde un “triángulo negro” flotante apareció sobre buques rusos sin provocar reacción alguna. Brown sugirió que las fuerzas navales rusas esperaban el objeto, lo que implica un nivel de coordinación preestablecido.
Además, el informe menciona la existencia de una “civilización separatista” que opera fuera de los marcos nacionales, desarrollando tecnología avanzada mediante ingeniería inversa de materiales no humanos. Brown advirtió que esta entidad ha infiltrado gobiernos y corporaciones, manipulándolos para sus propios fines.
El Llamado a la Transparencia y la Resistencia del Congreso
Jeremy Corbell, en declaraciones a Liberation Times, criticó la obstrucción sistemática de las agencias de inteligencia hacia las investigaciones del Congreso. “Hemos intentado cooperar, pero nos han traicionado una y otra vez”, afirmó. Corbell y Knapp han facilitado sesiones informativas confidenciales para legisladores, pero según ellos, algunos congresistas han sido intimidados para frenar cualquier avance hacia la divulgación.
Brown, por su parte, instó a una acción inmediata: “Ya no es permisible privar a la humanidad de la verdad. Esto va más allá de la tecnología; se trata de nuestra identidad como especie”.
Un Secreto que Ya No Puede Contenerse
Las declaraciones de Matthew Brown representan un punto de inflexión en el debate sobre los fenómenos aéreos no identificados (UAP) y los programas secretos que los estudian. Su testimonio no solo expone un sistema de ocultamiento profundamente arraigado, sino que también plantea preguntas urgentes sobre quién controla esta tecnología y con qué propósito.
Mientras el Congreso evalúa su próximo movimiento, una cosa es clara: la presión por la transparencia es imparable, y figuras como Brown están dispuestas a sacrificarlo todo para que la verdad salga a la luz.