El Misterio del OVNI de Carbondale: ¿Accidente Extraterrestre o Engaño Adolescente?

Un incidente olvidado que desconcertó a ufólogos y autoridades en 1974

En la noche del 10 de noviembre de 1974, la tranquila ciudad de Carbondale, Pensilvania, se convirtió en el epicentro de un misterio que capturó la atención de investigadores de ovnis, medios de comunicación y agencias gubernamentales. Un objeto luminoso, descrito como una masa llameante con chispas rojizas, fue reportado por un grupo de adolescentes antes de desaparecer en las turbias aguas de un estanque abandonado. Lo que siguió fue una operación de recuperación de 44 horas que mezcló ciencia, especulación y rumores, dejando más preguntas que respuestas.

El Avistamiento y la Llegada de las Autoridades

Según los testimonios de los jóvenes testigos, el objeto surcó el cielo a gran velocidad antes de caer en un estanque de sedimentos cerca del parque Russell. La policía local, liderada por el sargento Francis X. Dottle, acordonó el área y confirmó la presencia de una extraña luz pulsante bajo el agua. Preocupados por la posibilidad de que se tratara de un artefacto radiactivo o restos de un satélite, las autoridades contactaron al Dr. J. Allen Hynek, reconocido astrónomo y consultor del Proyecto Libro Azul de la Fuerza Aérea.

Hynek descartó la teoría de un meteorito, ya que estos no suelen emitir luz bajo el agua, y sugirió el uso de un contador Geiger para medir posibles niveles de radiación. Mientras tanto, investigadores civiles de fenómenos OVNI, incluido el director del Centro de Informes e Información OVNI (UFORIC), llegaron al lugar para colaborar en la búsqueda.

La Operación de Recuperación y los Rumores

Con el paso de las horas, la multitud en Carbondale creció exponencialmente. Más de 3,000 curiosos y periodistas se congregaron alrededor del estanque, mientras equipos de bomberos intentaban drenar el agua para localizar el objeto. Se utilizaron retroexcavadoras, imanes industriales e incluso un buzo voluntario, Mark Stamey, quien se sumergió en el lodazal sin éxito.

Los rumores se dispararon: desde teorías sobre un misil soviético hasta especulaciones de que militares habían extraído en secreto una nave extraterrestre. Sin embargo, las investigaciones no encontraron evidencia de metal, radiactividad o restos físicos. La hipótesis más plausible apuntaba a una linterna sumergida, cuya luz se distorsionaba en el agua turbia, creando la ilusión de un objeto más grande.

El Legado del Incidente

A diferencia de casos como Roswell o Kecksburg, el incidente de Carbondale no dejó rastros concluyentes. Los investigadores sugirieron que los adolescentes podrían haber confundido un bólido (meteoro brillante) con un OVNI, o incluso haber perpetrado un engaño que se salió de control. Aun así, el evento sigue siendo un ejemplo fascinante de cómo el folclore moderno y la psicología colectiva pueden transformar un suceso ordinario en una leyenda urbana.

Hoy, Carbondale sigue siendo un punto de interés para los entusiastas de lo paranormal, aunque el misterio del “platillo hundido” nunca fue resuelto. ¿Fue un fenómeno astronómico, una broma juvenil o algo más? La respuesta, como el objeto en el estanque, parece haberse desvanecido en la oscuridad.

 

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