El misterioso “Incidente de la Isla Maury”: Entre OVNIs, los hombre de negro, engaños y una tragedia aérea
La historia que inició con escombros caídos del cielo y amenazas de “hombres de negro”, y terminó con la muerte de dos oficiales de la Fuerza Aérea, sigue capturando la imaginación de investigadores y cineastas, aunque es considerado por muchos como un fraude.
El Incidente de la Isla Maury, que tuvo lugar en junio de 1947, es uno de los episodios más controvertidos en la historia de los avistamientos de objetos voladores no identificados (OVNIs) en los Estados Unidos. Aunque sus orígenes están rodeados de teorías de conspiración y fenómenos paranormales, la mayoría de los expertos, incluso entre los creyentes en OVNIs, consideran que la historia fue un elaborado engaño. Sin embargo, el incidente dejó una marca indeleble en la cultura popular y ha inspirado películas, arte y hasta celebraciones locales en la ciudad de Des Moines, Washington.
Un avistamiento extraño y escombros caídos del cielo
El incidente comenzó el 21 de junio de 1947, cuando Harold Dahl y Fred Crisman, dos patrulleros portuarios en la Bahía Este de la Isla Maury, reportaron haber visto seis objetos voladores gigantes en el cielo. Según Dahl, uno de los objetos comenzó a liberar una gran cantidad de escombros, descritos como “un tipo de metal blanco muy ligero”, que descendieron hacia su embarcación. Algunas de estas piezas de escombro habrían causado daños: el brazo de uno de sus compañeros se rompió, y el perro de Dahl falleció.
Después del avistamiento, Dahl alegó que fue visitado por un misterioso hombre vestido de negro, quien lo amenazó para que no divulgara los detalles del evento. Esta supuesta visita es uno de los primeros relatos conocidos de los “hombres de negro”, figuras enigmáticas vinculadas a la supresión de información sobre fenómenos extraterrestres.
La conexión con Kenneth Arnold y el Proyecto Libro Azul
Pocos días después de que la historia de Dahl y Crisman se hiciera pública, el piloto privado Kenneth Arnold, famoso por haber reportado el avistamiento de nueve OVNIs cerca del Monte Rainier, fue contactado por el editor de la revista Amazing Stories, Raymond A. Palmer. Palmer convenció a Arnold de viajar a Tacoma, Washington, para investigar el suceso. Arnold accedió y viajó con 200 dólares provistos por Palmer para investigar el supuesto avistamiento y recuperar los fragmentos de escombros que Dahl y Crisman afirmaban haber recogido.
Arnold, acompañado por el capitán E.J. Smith de United Airlines, quien también había informado haber visto OVNIs, fue testigo de los fragmentos que Crisman y Dahl le presentaron. Sin embargo, Arnold y Smith concluyeron que estos materiales no eran tan extraños como Dahl había afirmado inicialmente.
Tragedia aérea: Dos oficiales de la Fuerza Aérea pierden la vida
Para darle más credibilidad a la investigación, Arnold contactó a dos oficiales de inteligencia de la Fuerza Aérea, el teniente Frank Brown y el capitán William L. Davidson, quienes llegaron a Tacoma para llevar a cabo entrevistas y analizar los fragmentos de escombros. Tras recoger el material, los oficiales planearon regresar a California el 1 de agosto de 1947.
Trágicamente, durante su vuelo de regreso, el avión B-25 Mitchell en el que viajaban se estrelló en las afueras de Kelso, Washington, causando la muerte de ambos oficiales. Este accidente alimentó aún más las teorías de conspiración, ya que algunos creían que las muertes estaban vinculadas a los eventos de la Isla Maury y al misterioso hombre de negro.
Un engaño revelado y el fin del misterio
Poco después del accidente, el FBI inició una investigación formal sobre el incidente de la Isla Maury. Los hallazgos fueron claros: el suceso era un engaño. En su investigación, descubrieron que Dahl había admitido que la historia era falsa y que tanto él como Crisman habían buscado lucrar con la publicidad que el caso había generado. Las declaraciones contradictorias de ambos hombres y la falta de evidencia concluyente confirmaron lo que muchos ya sospechaban.
El Proyecto Libro Azul, una iniciativa de la Fuerza Aérea de los EE. UU. dedicada a investigar fenómenos aéreos no identificados, también revisó el caso. Edward J. Ruppelt, jefe del proyecto, calificó el incidente como “el engaño más sucio en la historia de los OVNIs”. A pesar de estas conclusiones oficiales, el evento ha mantenido su lugar en el folclore de los avistamientos de OVNIs.
Un legado que perdura
A pesar de haber sido desacreditado, el Incidente de la Isla Maury continúa capturando la imaginación del público. En 1956, el escritor Gray Barker popularizó la historia de los “hombres de negro” en su libro They Knew Too Much About Flying Saucers, citando el caso de la Isla Maury como un ejemplo de intervención gubernamental para encubrir la verdad sobre los OVNIs.
En la cultura local, la historia ha dejado una huella duradera. En 2017, el Senado del estado de Washington reconoció oficialmente el 70.º aniversario del incidente. Además, en la ciudad de Des Moines, cercana a la Isla Maury, se celebra anualmente la “Fiesta de cumpleaños de los Hombres de Negro”, un evento que combina diversión y misterio en torno al legendario engaño.
El cortometraje The Maury Island Incident, lanzado en 2014, ofrece una interpretación cinematográfica del evento, relatando los sucesos desde la perspectiva de Dahl. En Des Moines, un mural público también honra el incidente, perpetuando la memoria de uno de los episodios más curiosos y controvertidos en la historia de los avistamientos de OVNIs en Estados Unidos.
El incidente de la Isla Maury, aunque considerado un engaño, sigue siendo una pieza fascinante de la historia de los OVNIs y las conspiraciones en torno a estos fenómenos. A lo largo de los años, ha inspirado narrativas tanto serias como fantásticas, y ha dejado un legado duradero en la cultura popular, desde películas y libros hasta arte y festivales locales. Aunque las investigaciones oficiales han desacreditado los hechos, la historia continúa evocando preguntas sobre los límites entre lo real, lo ficticio y el deseo humano de creer en lo extraordinario.