Encuentros Cercanos en Nueva Zelanda: El Documental que busca conectar con extraterrestres
La cineasta Alexis Smith desafía los límites de lo conocido con “Out There”, un documental que explora el contacto humano-extraterrestre a través de meditación y experiencias sobrenaturales.
En un rincón remoto de Nueva Zelanda, un grupo de personas afirma haber hecho contacto directo con extraterrestres, y ahora están invitando a otros a unirse a la experiencia. En medio de la oscuridad de las noches estrelladas, las montañas de Aoraki Mackenzie, una cineasta y su equipo comenzaron un viaje que buscaba respuestas a una de las preguntas más fascinantes de la humanidad: ¿estamos solos en el universo?
Alexis Smith, conocida por su trabajo en documentales científicos, se embarcó en una aventura poco convencional con su último proyecto, Out There, una película centrada en los encuentros cercanos del quinto tipo (CE-5). Este tipo de contacto no involucra solo la observación de fenómenos aéreos no identificados (FANIs), sino que se basa en la creencia de que los humanos pueden iniciar una comunicación directa con seres de otros mundos. A través de sesiones de meditación grupal y prácticas de telepatía, Smith buscó captar evidencia de estos encuentros para su documental.
Nueva Zelanda: Un Refugio para el Contacto Extraterrestre
Nueva Zelanda, con sus vastas extensiones de naturaleza intacta y cielos despejados, ha emergido como un imán para quienes buscan avistamientos de ovnis y contacto extraterrestre. Su relativa tranquilidad, combinada con una mínima presencia militar, ofrece el escenario perfecto para las actividades del movimiento CE-5, que ya ha captado la atención de grupos en todo el mundo. Esta red organiza reuniones donde los participantes meditan, buscando invitar a seres extraterrestres a que se manifiesten pacíficamente.
Lo que distingue a este movimiento es la cantidad de testimonios de personas que afirman haber tenido encuentros sobrenaturales, muchos de los cuales son apoyados por videos, fotos y experiencias personales. Según Smith, la cantidad de personas dispuestas a compartir sus historias es sorprendente, desde ovnis que aparecen sin previo aviso hasta seres que se materializan en los hogares de las personas, a menudo acompañados por luces extrañas o sensaciones telepáticas.
La Ciencia Ficción Hecha Realidad
Smith, con una carrera forjada en documentales científicos tradicionales, nunca pensó que llegaría a estar en el centro de un fenómeno tan insólito. “La vida se había convertido en una película de ciencia ficción”, menciona, “y quién sabe, tal vez al final del rodaje pediría a un extraterrestre que firmara un formulario de autorización”.
Antes de comenzar la filmación, Smith y su equipo se comprometieron a seguir los protocolos CE-5, lo que significaba meditar todas las noches durante semanas antes del evento principal en Aoraki Mackenzie. Estas meditaciones tenían como objetivo comunicarse telepáticamente con seres extraterrestres, informándoles sobre la filmación y solicitando su participación. Aunque pueda sonar inverosímil para algunos, para los practicantes de CE-5, estas experiencias de contacto son parte de una realidad que solo aquellos con la mente abierta pueden presenciar.
Durante su expedición de cinco días, Smith y un grupo de diez participantes meditaron bajo las estrellas, esperando que las manifestaciones extraterrestres se hicieran visibles. Muchos reportaron haber presenciado luces que se movían de manera errática, desapareciendo y apareciendo sin explicación. Algunos incluso sintieron vibraciones y zumbidos en sus cuerpos, lo que, para ellos, era señal de una presencia desconocida.
Estigma y Misterio en el Camino Hacia el Contacto
Para Alexis Smith, enfrentarse a los desafíos de hacer un documental sobre extraterrestres no solo implicaba captar fenómenos inexplicables, sino también lidiar con el escepticismo y el ridículo. Durante su carrera, había trabajado en proyectos serios con científicos de renombre, pero este proyecto la llevó a un territorio nuevo y peligroso para su reputación. La misma preocupación que la cineasta sintió, también la compartieron muchas de las personas que entrevistó.
Muchos de los participantes habían experimentado una enorme presión social al compartir sus historias. Algunos hablaron de ser testigos de naves espaciales, mientras que otros relataron haber visto orbes luminosos que transmitían mensajes telepáticos. Kimberly Porth, una de las entrevistadas, mencionó haber tenido experiencias a bordo de una nave cuando tenía 20 años, mientras que Doug Parker, otro participante, reveló que todavía sentía miedo al hablar públicamente sobre sus experiencias.
¿Respuestas o Más Preguntas?
A lo largo de la filmación, Alexis Smith tuvo momentos en los que realmente creyó que algo estaba sucediendo más allá de su comprensión. En la tercera noche de rodaje, mientras intentaban hacer un contacto cercano con seres de otro mundo, los participantes experimentaron fenómenos extraños. “Sentí vibraciones en mi cuerpo y una presión en la cabeza”, relata Smith, “y algunos afirmaron haber visto luces e incluso sentir que los tocaban”. El equipo logró capturar parte de estos fenómenos en fotografías de lapso de tiempo, lo que alimentó aún más la curiosidad de la cineasta.
Sin embargo, Smith evita hacer afirmaciones definitivas sobre lo que presenció. “No diré que lo que filmamos era extraterrestre”, dice, “pero ciertamente ha despertado mi interés por investigar más a fondo”.
El Llamado a la Exploración Cósmica
El viaje de Alexis Smith en Out There no es solo sobre buscar pruebas de vida extraterrestre. Se trata de abrir la mente a lo desconocido, de cuestionar lo que creemos saber sobre nuestro lugar en el cosmos. En un mundo donde el escepticismo y la creencia en lo imposible a menudo chocan, su documental invita al espectador a formar su propia opinión, basado en los testimonios y evidencias que presenta. Tal vez no tengamos todas las respuestas, pero lo que queda claro es que el universo está lleno de misterios por descubrir, y las personas en Nueva Zelanda parecen estar en el centro de uno de los más fascinantes.