La NASA confirma anomalía en la sonda espacial Voyager 1

La NASA ha anunciado que la sonda espacial Voyager 1 ha experimentado una anomalía que ha dificultado su capacidad para enviar datos a la Tierra en los últimos meses. Según los especialistas, la causa de esta extraña situación es un daño en el hardware de la memoria de la sonda.

El comunicado oficial de la agencia espacial señala que “los ingenieros han confirmado que una pequeña porción de memoria dañada en uno de los ordenadores a bordo de la sonda Voyager 1 de la NASA ha estado provocando que la nave envíe a la Tierra datos científicos y de ingeniería ilegibles desde el pasado mes de noviembre”. A principios de marzo, el equipo confirmó que alrededor del 3 % de la memoria del ordenador responsable de empaquetar los datos antes de enviarlos a la Tierra se había dañado, lo que afectó al funcionamiento del chip encargado de almacenar la información. Este daño podría haber sido causado por partículas energéticas del espacio o simplemente debido al desgaste por el paso del tiempo.

La Voyager 1, junto con su gemela Voyager 2, fue lanzada en 1977 y ostenta el récord de ser la nave espacial más antigua aún en funcionamiento. Ambas sondas se encuentran en el espacio interestelar, a una distancia asombrosa de aproximadamente 24.000 y 20.000 millones de kilómetros de la Tierra, respectivamente.

Los problemas con la Voyager 1 comenzaron a finales de 2023, cuando comenzó a transmitir a la Tierra una serie de datos sin sentido en lugar de la información esperada, lo que interrumpió la comunicación con el equipo científico en nuestro planeta. Posteriormente, se descubrió que el fallo residía en una de las tres computadoras de a bordo, conocida como sistema de datos de vuelo (FDS, por sus siglas en inglés).

Este incidente resalta los desafíos continuos que enfrentan las misiones espaciales de larga duración y subraya la importancia de la ingeniería robusta y la planificación cuidadosa para garantizar el éxito de estas ambiciosas empresas científicas. A pesar de este contratiempo, la sonda Voyager 1 sigue siendo un testimonio impresionante de la capacidad humana para explorar y comprender el vasto universo que nos rodea.11

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