Las misteriosa isla “El Ojo”: El enigma de la isla giratoria en el delta del Paraná que desafía las leyes de la naturaleza

En la región del Noreste de Argentina, en el meandro del intrincado y húmedo delta del río Paraná, se encuentra un fenómeno insólito que ha capturado la atención de científicos y lugareños por igual: la enigmática isla conocida como “El Ojo”. Esta isla, con un diámetro de 118 metros, reposa sobre una superficie de agua ligeramente más extensa, exhibiendo orillas planas que definen un círculo perfectamente delineado.

Lo que hace a esta isla aún más peculiar es su conformación circular, en perfecta correspondencia con la forma del lago donde yace. Esta ocupación del 80% de la superficie del lago brinda la impresión visual de una medialuna, una característica única que la distingue.

Recientes investigaciones se centraron en las características físicas del agua circundante, revelando una sorprendente nitidez y una temperatura notablemente fría, cualidades singulares para la zona. Además, contrastando con las áreas adyacentes, la tierra que compone “El Ojo” exhibe una solidez excepcional.

Sin embargo, el aspecto más intrigante es el constante movimiento y la rotación de la isla sobre su propio eje en sentido horario. Esta curiosa dinámica puede apreciarse fácilmente mediante imágenes satelitales de Google, que muestran cambios significativos en su posición a lo largo de los años.

Los habitantes locales han sido conscientes de este fenómeno desde tiempos remotos, aunque mantienen distancia debido a una creencia arraigada: consideran que en este lugar reside una antigua deidad, lo que les ha disuadido de acercarse.

Históricamente, la región albergó a los querandíes, una etnia de la región pampeana, evidenciado por los restos de alfarería indígena encontrados a orillas del río Luján, en cercanías de “El Ojo”. Asimismo, se han identificado antiguos cementerios en el área, subrayando la importancia histórica y cultural de este sitio.

Sergio Neuspiller, reconocido director de cine argentino, afirmó haber descubierto la isla mientras filmaba una película en el Delta del Paraná. Sostenía la existencia de relatos sobre presuntas entidades en la zona, sumando misterio a esta singularidad natural.

A pesar de las conjeturas, los estudios sugieren que “El Ojo” podría ser un embalse de vegetación, una estructura terrestre que, al desprenderse, genera una isla flotante. Estas islas se desplazan a merced de las corrientes de agua y la influencia del viento, lo que podría explicar su aparente movimiento.

Ubicado a escasos 7 km de la Reserva Natural Otamendi y a apenas 15 km de la ciudad de Campana, este lugar continúa siendo un enigma natural que despierta fascinación y debate entre científicos, lugareños y aficionados a lo inexplicable.

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