Lo que No Quieren que Sepas: La Guerra Secreta por el Control de la Tecnología y la Conciencia Extraterrestre.
Un diálogo exclusivo entre el historiador Richard Dolan y el ex oficial de inteligencia Paul H. Smith revela puntos de contacto cruciales entre la conciencia humana y el fenómeno no identificado, sugiriendo un programa secreto de visualización remota para investigar el incidente del USS Nimitz.
En un giro que parece extraído de la ciencia ficción, las fronteras entre el estudio de los Objetos Voladores No Identificados (OVNI) y la exploración de los límites de la conciencia humana se están disolviendo rápidamente. Lo que antaño fueron campos de investigación separados y a menudo estigmatizados, hoy convergen en una narrativa compleja que sugiere que el misterio último del Fenómeno podría residir no solo en la tecnología, sino en la mente. Esta fusión de disciplinas ha dejado de ser una especulación marginal para convertirse en un tema de discusión seria, avalada por testimonios de individuos con un historial impecable en los círculos de inteligencia y defensa.
El Encuentro de Dos Mundos
El punto de inflexión en esta convergencia se hizo palpable en una reciente conversación exclusiva entre dos pesos pesados de sus respectivos campos: Richard Dolan, uno de los historiadores más respetados en ufología, y el Mayor (R) Paul H. Smith, ex oficial de inteligencia del Ejército y veterano del ultrasecreto programa Stargate de visualización remota. Su diálogo, facilitado por el podcaster Michael en “MindMeld”, revela una interconexión entre ambos mundos más profunda y antigua de lo que el público imagina.
Smith, un académico con un doctorado en Filosofía y autor de “Reading the Enemy’s Mind”, aporta una perspectiva única. Aunque durante años mantuvo cierta distancia del tema OVNI para preservar la integridad de la visualización remota, su participación en un proyecto clasificado en 2011 lo obligó a sumergirse directamente. “Fui contratado para reunir un equipo de personas para visualizar remotamente ese incidente”, reveló Smith, refiriéndose al ahora famoso encuentro del USS Nimitz de 2004. Aunque bound por un Acuerdo de No Divulgación (NDA), Smith confirmó la existencia de este esfuerzo, que incluyó la construcción de salas especializadas y un equipo completo, sugiriendo fuertemente la participación de programas gubernamentales como la AATIP (Programa de Identificación de Amenazas Aeroespaciales Avanzadas).
La Conciencia como Denominador Común
Para Smith, el nexo natural entre su trabajo y el Fenómeno es la conciencia. “Está claro que los ET tienen mucho más acceso al uso de la conciencia que los humanos”, afirmó. Esta idea, originalmente promovida por pioneros como Ingo Swann, postula que estas inteligencias poseen una maestría tecnológica, pero también una capacidad superior para interactuar con y manipular la percepción y la realidad consciente. Smith advierte que esto no implica necesariamente una moralidad superior, sino una sofisticación en un ámbito que la ciencia convencional apenas comienza a entender.
Dolan, autor de obras fundamentales como “UFOs and the National Security State”, coincide en este análisis. A partir de su exhaustivo estudio de miles de informes, incluyendo cientos de casos de Objetos Sumergidos No Identificados (OSNI), observa un patrón de interacción inteligente y calculada. “Estos objetos muestran una confianza extrema, shadowing buques militares, interfiriendo con sistemas electromagnéticos y gestionando su visibilidad”, explicó Dolan. Esta capacidad de alterar sistemas electrónicos y, potencialmente, la percepción humana, apunta a un dominio de la interfaz entre lo físico y lo mental.
El Dilema de la Divulgación y una Realidad Transformadora
Ante la pregunta de una “Divulgación” total, ambos expertos muestran escepticismo. Smith cree que es un “error de tontos” esperar que alguien entregue “una carpeta cronológicamente ordenada” con todas las respuestas. Dolan, por su parte, sostiene que, si bien es probable que existan artefactos tecnológicos y biológicos recuperados, la estructura de secretismo es tan compleja y está tan arraigada en entidades corporativo-gubernamentales que una revelación completa es casi imposible.
La razón, argumentan, va más allá del mero acaparamiento tecnológico. Dolan plantea que la verdadera revelación podría ser ontológicamente disruptiva. “Si pudiéramos hablar con un monje medieval sobre la naturaleza de la realidad, su cabeza estallaría”, analogó. “Estamos en una posición similar”. La comprensión completa del Fenómeno podría obligar a una revisión total de nuestra física, nuestra comprensión de la conciencia y nuestro lugar en el universo. Tecnologías como la propulsión avanzada o la energía libre, aunque transformadoras, podrían ser solo la punta del iceberg comparado con las implicaciones de una conciencia expandida.
Un Futuro de Interacción Consciente
La conversación entre Dolan y Smith no ofrece respuestas simples, pero traza un mapa más claro del territorio. El Fenómeno OVNI/UAP ya no puede ser encasillado como un misterio meramente aeroespacial. Es un rompecabezas multidimensional que involucra la materia, la mente y, posiblemente, realidades que aún no podemos concebir.
La creciente prominencia de la “psiónica” –el uso de facultades conscientes para interactuar con estos objetos–, aunque controvertida, es un síntoma de esta evolución. El camino a seguir, sugieren estos expertos, no es solo esperar pasivamente la divulgación, sino continuar la investigación rigurosa y abrir la mente a la posibilidad de que la próxima gran frontera no esté en las estrellas, sino dentro de la conciencia humana misma, esperando ser descubierta para entablar un diálogo, por fin significativo, con lo desconocido.
