Los famosos canales de Venecia se han secado como resultado de un cálido invierno.
Gracias a un invierno anormalmente cálido, los europeos lograron pasar el invierno de manera segura en las condiciones de la crisis energética más aguda. Sin embargo, los principales problemas de los habitantes de Europa parecen acechar el verano. El hecho es que, como resultado de un invierno sin nieve, los ríos más grandes de la región se vuelven catastróficamente poco profundos.
En los últimos tres años, Italia se ha convertido en uno de los países europeos más afectados por la sequía. El río más grande del país, el Po, tiene menos del 40% de agua. Lo que está sucediendo en Venecia solo puede llamarse un desastre: sus famosos canales se secan en la ciudad.
Como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, Venecia es muy popular entre los turistas de todo el mundo precisamente por sus canales. Sin embargo, fotos recientes publicadas en Internet y en los medios muestran largos tramos de canales poco profundos que se han convertido en charcos de lodo. Además del turismo, la infraestructura urbana también sufre, en particular, el transporte urbano (principalmente acuático), incluidas las ambulancias.
Por lo general, en el período otoño-invierno, debido a las lluvias en Venecia, a veces se observó incluso un exceso de agua, por lo que el centro de la ciudad quedó parcialmente inundado. Sin embargo, hoy las autoridades de la ciudad son impotentes ante los caprichos de la naturaleza y solo pueden orar por el regalo de al menos 50 días de lluvia. Solo esto ayudará a Venecia a superar la devastadora crisis del agua.