Los peces a bordo de la estación espacial china se comportan de forma muy extraña
La Agencia Espacial Nacional de China ha dado un paso significativo en la investigación espacial al publicar un video que muestra parte del experimento con peces que se lleva a cabo en la estación orbital Tiangong. En el experimento, cuatro pequeños peces cebra fueron entregados a la estación el mes pasado. Aunque su condición física no es la ideal, su comportamiento en microgravedad ha sorprendido a los científicos.
Uno de los principales problemas que enfrentan los peces en condiciones de microgravedad es la pérdida del concepto de “arriba”. Este fenómeno se observó por primera vez en 1973 en la estación espacial Skylab, donde dos peces fundulus nadaban desorientados, confundiendo la fuente de luz con el sol. Los peces en el Tiangong presentan comportamientos similares, nadando boca arriba, describiendo bucles extraños y moviéndose en círculos.
Comportamientos Inesperados
Lo que resulta particularmente sorprendente es que estos peces cebra habían sido seleccionados por su familiaridad con la microgravedad. A pesar de su entrenamiento, siguen mostrando anomalías en su comportamiento. Esta observación plantea preguntas interesantes sobre cómo los seres vivos, incluso aquellos adaptados a la microgravedad, reaccionan a un entorno sin gravedad constante.
El objetivo principal del experimento es estudiar los efectos a largo plazo de la ingravidez en seres vivos altamente desarrollados. En 2021, los astronautas japoneses descubrieron que los peces enviados a la Estación Espacial Internacional (ISS) mostraban una disminución en la densidad ósea, un fenómeno similar al observado en los humanos. Los taikonautas chinos buscan profundizar en este estudio, observando varias generaciones de peces para comprender cómo la gravedad afecta el desarrollo óseo desde juveniles hasta la madurez.
Este tipo de investigación es crucial para el futuro de la exploración espacial. Entender cómo la microgravedad afecta a los vertebrados puede proporcionar información valiosa para la salud de los astronautas en misiones de larga duración. Además, estos estudios podrían tener aplicaciones en la medicina terrestre, ayudando a tratar condiciones relacionadas con la densidad ósea y otros efectos de la falta de gravedad.
La investigación con peces cebra en la estación espacial Tiangong no solo aporta conocimiento sobre cómo la microgravedad afecta a los seres vivos, sino que también abre la puerta a nuevas investigaciones que podrían beneficiar tanto a la exploración espacial como a la medicina en la Tierra. La Agencia Espacial Nacional de China continúa liderando en este campo, mostrando que el estudio de la vida en el espacio es tan vital como la exploración misma.