Misterios entre rieles: Leyendas de los trenes fantasmas entre Estados Unidos y Canadá
Durante muchos años, dos trenes han sido arraigados en la imaginación popular como representantes de los misteriosos y evocativos trenes fantasmas, uno situado en Estados Unidos y el otro en Canadá. Estos trenes, símbolos de una época en la que los ferrocarriles eran el principal medio de transporte en Norteamérica, han acumulado un aura de enigma y fascinación a lo largo del tiempo.
En Estados Unidos, el tren fantasmal más famoso se dice que merodea por la región del Hudson. Según numerosos testimonios, se avista un tren que lleva consigo un vagón envuelto en velos oscuros, transportando un ataúd rodeado de personas afligidas. La leyenda narra que el tren está custodiado por esqueletos ataviados con uniformes azules, y aunque suenen campanas, el origen de este sonido se mantiene en el misterio. Se sostiene que este tren es el mismo que transportó los restos mortales del presidente Abraham Lincoln en abril de 1865, recorriendo 1700 millas desde Washington hasta Springfield, Illinois, donde fue sepultado. Lamentablemente, el tren que realizó este histórico traslado fue consumido por un incendio en 1911, dejando tras de sí únicamente su presencia fantasmal, según la creencia popular.
Por otro lado, en Canadá, se encuentra el célebre tren fantasma conocido como “The St. Louis Ghost Train”, ubicado en la provincia de Saskatchewan. En una región donde las historias de apariciones y leyendas son abundantes, sobresale la leyenda de las luces del tren fantasma de St. Louis. Testigos han afirmado ver a lo lejos las luces de un tren acercándose cerca de la medianoche. Sin embargo, a pesar de la aparente cercanía de las luces, aquellos que han esperado durante horas aseguran que el tren nunca pasa frente a ellos, creando un enigma aún sin resolver en la región.
Estas historias alimentan la fascinación colectiva por lo inexplicable y lo sobrenatural, dejando a la imaginación libre para tejer relatos que trascienden el tiempo y se convierten en parte del folclore de estas regiones. Los trenes fantasma representan una conexión entre el pasado y el presente, atrapados en un etéreo y eterno viaje que continúa cautivando a aquellos que buscan lo enigmático y lo insólito en el mundo que nos rodea.