Nuevas evidencias revelan que seis OVNIs aterrizaron en Rendlesham: ¿Encubrimiento militar o visitas de otros mundos?

El cineasta e investigador Mark Christopher Lee desvela documentos inéditos que replantean el célebre incidente de 1980, sugiriendo una operación secreta entre EE.UU. y el Reino Unido.

El incidente OVNI del bosque de Rendlesham, ocurrido en diciembre de 1980 cerca de las bases militares estadounidenses Woodbridge y Bentwaters en Suffolk, Inglaterra, ha sido considerado durante décadas como uno de los casos más sólidos de encuentros con fenómenos aéreos no identificados. Conocido como “el Roswell británico”, el evento involucró a personal militar que reportó luces inexplicables, una nave triangular e incluso un supuesto aterrizaje. Ahora, nuevas evidencias presentadas por el investigador y cineasta Mark Christopher Lee sugieren que no fue un solo objeto el que descendió en el bosque, sino seis, y que detrás de este misterio podría esconderse un programa ultrasecreto de tecnología avanzada.

El Descubrimiento de Documentos Inéditos

Lee, quien ha tenido acceso a archivos clasificados en el Gran Centro Británico de Aprendizaje sobre OVNIs, dirigido por el exdetective de la policía John Hanson, ha revelado un boceto detallado y anotado realizado por el investigador Peter Parish. Este documento, creado para el entonces subcomandante de la base, coronel Charles Halt, indica que al menos seis aeronaves estuvieron involucradas en el incidente.

Según las anotaciones, una de estas naves fue presenciada por miembros del Ejército Territorial, quienes describieron cómo la arena del lugar de aterrizaje se vitrificó debido al intenso calor. Además, un testigo civil, un paseador de perros, afirmó haber visto a hombres con trajes plateados cubriendo un objeto metálico en el bosque.

La Teoría del Programa Militar Secreto

Lee, quien ha utilizado esta información como base para su nueva película “El OVNI de Rendlesham: El Roswell británico”, plantea una teoría alternativa a la hipótesis extraterrestre. Según su investigación, lo ocurrido en Rendlesham podría haber sido una prueba de tecnología aeronáutica avanzada desarrollada conjuntamente por Estados Unidos y el Reino Unido.

“Si estos documentos son precisos, lo que presenciaron los militares no fue una nave alienígena, sino un prototipo ultrasecreto”, afirma Lee. “La ubicación cercana a la base de investigación de Orford Ness, conocida por sus experimentos militares, refuerza esta posibilidad”.

Esta teoría cobra mayor peso al considerar las declaraciones de la difunta investigadora Georgina Bruni, quien en su momento reveló que la entonces primera ministra Margaret Thatcher le confesó que el incidente “no era algo de lo que se pudiera hablar públicamente”.

Implicaciones y Consecuencias

El investigador también señala que los problemas de salud sufridos por varios de los militares involucrados, incluyendo casos de cáncer y otras afecciones, podrían estar relacionados con la exposición a radiación o materiales experimentales. De hecho, algunos de ellos recibieron pensiones por discapacidad tras años de litigios con el gobierno estadounidense.

El profesor Simon Holland, exeditor científico de la BBC, respalda esta línea de investigación. “Desde el Proyecto Manhattan, existe un interés constante por convertir avances científicos en aplicaciones militares. Rendlesham pudo ser un ejemplo de ello”, comenta.

¿Mito o Realidad?

A más de cuatro décadas del incidente, el caso Rendlesham sigue generando controversia. Las nuevas evidencias presentadas por Mark Christopher Lee no solo amplían el misterio, sino que plantean preguntas incómodas sobre la transparencia de los gobiernos en materia de tecnología militar.

¿Fue realmente un encuentro con inteligencias extraterrestres, o se trató de un experimento humano que salió mal? La respuesta, al menos por ahora, sigue oculta entre los archivos clasificados y los testimonios de quienes estuvieron allí.

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