Un Mensaje en una Botella Surca el Tiempo: Hallan en las Bahamas una Nota de 1971 desde un Pesquero de Nueva Jersey
El viaje transatlántico de 54 años de una botella de Dr Pepper culmina con un emotivo descubrimiento que cierra un círculo familiar y oceanográfico.
En una época de comunicación instantánea, el hallazgo de un mensaje en una botella sigue ejerciendo una fascinación profunda, un vínculo tangible con el pasado transportado por las corrientes. Esta es la historia de un viaje épico que comenzó en las frías aguas del Atlántico Norte y concluyó, más de medio siglo después, en una playa remota del Caribe, uniendo a dos extraños a través del tiempo y el océano.
El Origen: Un Joven Pesquero y un Gesto Espontáneo
La travesía inició en 1971. John Forsyth, un joven de 18 años natural de Neptune, Nueva Jersey, trabajaba a bordo del pesquero Miss Belmar. Durante una de esas largas jornadas a aproximadamente 145 kilómetros al este de la ensenada de Belmar, en la zona de pesca del Cañón del Hudson, Forsyth tuvo un impulso. Con un trozo de papel de embalaje marrón y su puño y letra, escribió un sencillo mensaje: “Enviado desde el barco pesquero Miss Belmar a 90 millas al este de Belmar Inlet. Si lo encuentran, por favor llamen o escriban a John Forsyth”. Introdujo la nota en una botella vacía de Dr Pepper y la lanzó por la borda, confiando su destino al azar de las corrientes.
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El Descubrimiento: La Perseverancia de un “Cazador de Mensajes”
Más de cinco décadas después y a unos 1,600 kilómetros de distancia, el destino de la botella se reveló. Clint Buffington, un profesor y compositor de Utah con una singular afición: rastrear y recuperar mensajes en botellas. Durante una exploración en una zona aislada del sur de las Bahamas en marzo de 2025, su ojo entrenado detectó algo inusual entre la vegetación. Era una botella de vidrio, con la etiqueta de Dr Pepper aún visible y en su interior, un papel marrón. Para Buffington, un veterano con más de 140 hallazgos, esta botella tenía un aura especial; era, con diferencia, la más antigua que había encontrado.
La Conexión: Redes Sociales y Memoria Histórica
Buffington documentó su descubrimiento en Instagram, mostrando la botella y el mensaje ya descolorido. La publicación, que mencionaba al Miss Belmar, se viralizó rápidamente en círculos de Nueva Jersey. La noticia llegó a oídos de Alan Shinn, el actual capitán y propietario del Miss Belmar, quien aún opera en la misma zona. Shinn, reconociendo el nombre de su antiguo colega, facilitó el contacto con Kathy Forsyth, hermana de John. Al revisar los antiguos cuadernos de bitácora de su hermano, Kathy encontró la anotación correspondiente al viaje de 1971, confirmando la autenticidad del increíble hallazgo.
Oceanógrafos consultados sobre el caso sugieren una ruta probable para la botella. Pudo haber sido capturada por el Giro del Atlántico Norte, un poderoso sistema de corrientes circulares. Desde su punto de origen, la botella pudo derivar hacia el este, acercándose a las costas europeas, para luego descender por las corrientes cerca de África Occidental y, finalmente, ser impulsada por los vientos alisios y la Corriente Ecuatorial del Norte a través del Atlántico hasta su destino final en las Bahamas. Un periplo de miles de kilómetros que demuestra la interconexión de los sistemas marinos globales.