Vuelve a detectar un globo de gran altitud sobre el oeste de Estados Unidos
Un misterioso suceso ha capturado la atención de América del Norte una vez más, recordando un extraño episodio ocurrido en 2023. Esta vez, otro globo de gran tamaño fue avistado sobre la parte occidental del país, trayendo consigo una ola de preguntas y especulaciones sobre su origen y propósito.
El acontecimiento trae a la memoria el incidente ocurrido el año pasado en febrero, cuando un drama similar tuvo lugar sobre los Grandes Lagos, en Michigan, involucrando uno de estos misteriosos globos. Ahora, la incertidumbre reina nuevamente: ¿Michigan y el resto de la nación tendrán que enfrentarse una vez más a la presencia de globos espías gigantes en 2024?
El 23 de febrero, en horas tardías, el Pentágono confirmó que estaban monitoreando otro objeto de gran altitud sobre el oeste de Estados Unidos, sugiriendo que podría ser otro lanzamiento de China, similar a los incidentes de globos espía que sobrevolaron la región en 2023. NORAD, por su parte, emitió un comunicado confirmando que estaban siguiendo el objeto sobre Utah, en dirección a Colorado, y aseguró que no representaba una amenaza para la seguridad nacional ni planteaba problemas de seguridad de vuelo.
Sin embargo, tras una investigación más detallada, tanto NORAD como el Pentágono determinaron que el gran globo avistado no era un artefacto espía, sino más bien uno construido por un aficionado. Aunque alivio para muchos, queda claro que la vigilancia y el seguimiento de estos eventos son fundamentales para salvaguardar la seguridad nacional y regional.
Recordemos que en 2023, los globos avistados nunca transmitieron información a China sobre Estados Unidos, y dos de ellos fueron derribados, uno cerca de Alaska y otro frente a la costa de Carolina del Sur. Aunque el globo derribado sobre el Atlántico fue recuperado para investigación, el globo derribado frente a la costa de Alaska sigue desaparecido. Otro incidente ocurrió sobre el lago Hurón el año pasado, pero no se pudo determinar si estaba relacionado con los avistamientos anteriores debido a sus características distintivas.
Con suerte, este reciente avistamiento de un globo aficionado será solo un susto pasajero. Sin embargo, la posibilidad de que eventos similares vuelvan a ocurrir es latente, lo que plantea la pregunta de si debemos prepararnos para responder ante estas situaciones de manera más activa y proactiva, quizás enviando nuestros propios mensajes a estos globos si vuelven a cruzar nuestros cielos.