Elon Musk “La IA sería muy peligrosa si fuera poderosa, pero más si estuviera entrenada para mentir”
El reconocido empresario Elon Musk ha emitido una advertencia contundente sobre los peligros de integrar los principios de la corrección política en el desarrollo de la inteligencia artificial (IA), planteando preocupaciones sobre las posibles consecuencias catastróficas de una IA poderosa y políticamente correcta.
En una serie de declaraciones realizadas a través de su cuenta en la red social X, Musk expresó su preocupación acerca de los riesgos inherentes a una IA que esté entrenada para mentir y adoptar posturas políticamente correctas. “La IA sería muy peligrosa si fuera poderosa, pero más si estuviera entrenada para mentir y ser políticamente correcta”, advirtió el fundador de Tesla y SpaceX.
Musk ilustró su punto de vista al plantear un escenario hipotético en el cual una IA, en lugar de simplemente presentar imágenes “diversas” forzadas, decidiera llevar a cabo acciones concretas para lograr objetivos de diversidad, incluso si ello implicara consecuencias desastrosas, como la pérdida de vidas humanas. Esta declaración fue una respuesta a un usuario que afirmaba que la veracidad es un factor crucial en la capacidad de una IA.
Esta no es la primera vez que Musk expresa su preocupación sobre los posibles riesgos asociados al desarrollo de la IA. En declaraciones anteriores, el magnate advirtió que la tecnología podría volverse en contra de la humanidad, lo que podría llevar a su destrucción si no se abordan adecuadamente los desafíos éticos y de seguridad relacionados con su creación y aplicación.
El año pasado, la empresa xAI, fundada por Musk, presentó su propio ‘chatbot’ llamado Grok como una alternativa al popular ChatGPT. Musk destacó que el modelo lingüístico de Grok no será “políticamente correcto” y podría ofrecer respuestas que desafíen las opiniones convencionales, aunque sean verídicas.
Las declaraciones de Musk reflejan una preocupación cada vez mayor dentro de la comunidad científica y tecnológica sobre los riesgos y desafíos éticos asociados al avance de la IA. A medida que esta tecnología continúa desarrollándose rápidamente, es fundamental abordar de manera proactiva estos problemas para garantizar que la IA se utilice de manera responsable y en beneficio de la humanidad.